Ciudad de México.- Los festejos de diciembre y vacaciones aceleraron los contagios de Covid-19 en los primeros días de 2022, por lo que las pruebas para diagnosticar coronavirus comenzaron a escasear en diferentes laboratorios y quioscos que instalaron las autoridades locales y federales.

Publimetro recorrió diferentes quioscos de salud que se reactivaron debido al alza de casos de coronavirus a nivel nacional, en donde se comprobó del incremento de la demanda de pruebas rápidas por personas de diferentes edades.

En estos lugares se detectó largas filas desde las 7:00 de la mañana por vecinos de distintas zonas de la capital mexicana, quienes afirmaron que asistieron a estos sitios después de presentar síntomas como fiebre, dolor de cuerpo y escurrimiento nasal, así como pérdida del olfato.

Empezamos con mucho dolor de cabeza y hasta temperatura, dimos aviso a todos nuestros familiares que nos reunimos en navidad y fin de año.

— Externó David Jiménez, encargado de un despacho en avenida Paseo de la Reforma, que dio positivo.
Debido a las largas filas que se registraron en estos sitios, los test gratuitos que se brindan en estos lugares fueron insuficientes.

Ante esta situación, decenas de personas optaron por buscar pruebas rápidas en locales y farmacias de los alrededores; sin embargo, la mayoría de estos negocios carecen de regulación por parte de autoridades sanitarias.

Al respecto, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, informó que duplicará las pruebas rápidas en los próximos días, así como ampliará los horarios de atención en los quioscos que se instalaron desde el inicio de la pandemia.

Ofrecen pruebas piratas
Ante el incremento de casos Covid y búsqueda de pruebas al inicio de este año, ciudadanos han caído en la desesperación de obtener pruebas rápidas que, no necesariamente cumplen con los requisitos que estipula la autoridad sanitaria.

Y es que la falta de permisos sanitarios por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (INDRE) destaparon un mercado negro en este giro.

Esto debido a que locales y negocios venden este tipo de pruebas que van desde 70 hasta los 250 pesos en diferentes sitios de la capital mexicana.

En el peor de los casos, negocios ofertan este tipo de productos cuando su giro comercial es totalmente diferente a la venta de insumos médicos.

Incluso en comercios ambulantes y farmacias similares ofrecen pruebas rápidas de distintas marcas a un precio menor de las que se ofertan en laboratorios certificados por la Cofepris y el INDRE.

El uso de pruebas serológicas que no estén autorizadas, representa un riesgo ya que pudieran llevar a una toma de decisiones equivocada, al utilizar una prueba cuyos resultados generen una interpretación inexacta, respecto a la posible presencia de anticuerpos contra el virus SARS CoV- 2— Precisó Cofepris.

Por si fuera poco, en supermercados también se detectó la venta clandestina de pruebas rápidas para diagnosticar el contagio del coronavirus.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que una prueba rápida sea eficaz debe tener certificaciones de autoridades, así como debe contar con un proceso previo de licencias y evaluación.

A nivel empresarial, la demanda de pruebas rápidas se incrementó hasta un 70% durante los últimos meses ante la necesidad de promover entornos seguros, según datos de la iniciativa privada.

Con lupa pruebas patito

• Adán Benavides Jones, director general del Hospital Clínica Nápoles en la CDMX.

¿Cuál es la diferencia entre un test rápido y una PCR?

Son varias cosas, pero te puedo decir que las llamadas pruebas de antígeno o rápidas, son las que realmente funcionan en estos momentos.

Las pruebas de anticuerpos se utilizan ahorita más como marcadores en lugar de detectar el Covid-19 de forma rápida en un individuo.

Por ejemplo, en las de antígenos se tiene una mayor especificidad y una menor sensibilidad, que quiere decir esto, que es mucho más exacta y confiable.

Y es que la prueba de antígeno de Covid-19 tiene una especificidad del 97%, es decir, que puede fallar muy poco, esa es la más recomendable.

Mientras que la PCR, es en donde se mide el RNA del virus, que es la cadena de reacción del virus.

Desgraciadamente esta prueba tarda hasta 72 horas, y la prueba rápida 15 minutos, esto por las condiciones que se han presentado en estos días.

En ambos casos el costo también marca una diferencia muy notable.

Definitivamente los casos se han incrementado y mientras las pruebas rápidas también han ido al alza.

¿Qué sucede con las pruebas rápidas pirata?

En lo particular, te puedo decir que me han ofrecido como director de un hospital lotes de pruebas pirata; sin embargo, he dicho que no a estos paquetes que circulan en todo el país.

Lo peligroso de esto es que se ofertan a un precio mucho menor y la gente opta por comprar lo más barato.

Además de que son demasiado baratas, el problema es que no tiene el permiso sanitario y al no tener un permiso quiere decir que no han cumplido con los mínimos estándares de calidad.

Para empezar, dan resultados irregulares, en todos los sentidos. Es un mercado negro muy grande, por lo que se tiene que regular desde varios aspectos.

Datos:

• 70 pesos es el precio que se pueden encontrar pruebas Covid en negocios y farmacias
• 100 sanciones ha interpuesto la Cofepris a negocios y empresas por vender pruebas rápidas que no cuentan con los permisos suficientes.

A destacar:

El subsecretario de Prevención y Promoción de Salud, Hugo López-Gatell, aseguró en 2020 que los resultados de las pruebas rápidas no son 100% confiables como las pruebas moleculares, por lo que recomendó no usarlas.

Incluso detalló que los resultados inexactos podrían confundir a la población o incluso ponerlos en riesgo en caso de que den un falso negativos.

Fuente Publimetro