CANCÚN, 24 DE MARZO. – Un profesor de la Facultad de Estudios Superiores FES Aragón, de la UNAM señaló a autoridades adscritas a la Fiscalía estatal mexiquense, por obstaculizar la búsqueda de su hija y nieto, quienes desaparecieron en la ciudad de Cancún el pasado 12 de febrero, provenientes del Estado de México.

El académico Juan José Nava narró que su hija y nieto viajaron a la ciudad de Cancún el 15 de enero, “con el ofrecimiento de hospedaje de un familiar del papá de mi nieto, quién les había ofrecido su casa en tanto se lograra colocar mi hija en un trabajo como enfermera general, que es su profesión, o bien en alguna actividad hotelera”.

Después de siete días, -cuenta Nava-, la persona que los hospedaba les pidió la casa, “y mi hija tuvo que rentar lo primero que encontró, agotando sus escasos recursos”.

Juan perdió comunicación con su hija el 12 de febrero, “cuando le insistí en que me diera su dirección para ir a verla, se cortó la llamada y no volví a tener más comunicación con ella”.

Además, “su Facebook había quedado conectado y su laptop enchufada, como a la fecha permanece”, añade Juan desde la página Ayuda para encontrar a Ruth y Misha, que abrió como parte del a búsqueda.

Juan solicitó las alertas ALBA para ambos casos, en la Fiscalía Especializada de Personas Desaparecidas, Secuestradas y con Desaparición Forzada. Posteriormente, su hija logró comunicarse con el.

El 12 de marzo recibí una llamada de mi hija, en la que gritaba sollozando que la dejáramos en paz, que no volviéramos a buscarla; percibí que su comportamiento era extraño y obedecía a que se encontraba bajo coacción.

Juan notó un comportamiento atípico de parte de su hija durante la llamada, además no contaba con una fotografía o alguna prueba de vida, para corroborar “que ambos familiares no presentaban rasgos de tortura”.

Sin embargo, el académico señala que dicha llamada bastó para que la búsqueda fuera cancelada por autoridades del Estado de México.

Dicha cancelación se vio complementada por la confirmación del Lic. Andrés González, Director General de Atención a Víctimas del Secuestro y Desaparición Forzada de Personas, por parte del gobierno del Estado de México, quien por escrito me confirmó que mi hija Ruth había comparecido ante el Ministerio Público de Cancún, donde declaró que se encontraba en perfecto estado junto con su hijo y que era su deseo no ser molestada por nadie, por lo que impidió hacer pública su información.

Sin embargo, al acudir a la ciudad de Cancún, Juan encontró que dicha acta de comparecencia no existía, y tampoco había un oficio de colaboración entre ambos estados.

Pese a la solicitud de la activación de alerta AMBER y ALBA, “no me ha sido proporcionada ni siquiera una copia de los registros de mis gestiones”.

Ante la omisión denunciada por el académico, este ha solicitado el apoyo de la ciudadanía para dar con el paradero de sus familiares.