CIUDAD DE MÉXICO, 18 DE JUNIO.- Las calles de México vibraron al ritmo de una frenética fiesta con miles de aficionados de la Selección Nacional de futbol, que brincaron, corrieron y danzaron al grito de “¡sí se pudo!” para festejar la victoria 1-0 contra Alemania en el Mundial de Rusia 2018.

La explanada del Zócalo, en el corazón de la Ciudad de México, hervía con la euforia de miles de personas, mientras el ardiente asfalto de la avenida Paseo de la Reforma se cimbraba cuando una horda se arremolinó al emblemático Ángel de la Independencia para festejar con mariachis, tequila y cientos de banderas tricolores.

En las saturadas arterias de la capital mexicana, automovilistas, ciclistas y motociclistas hacían sonar sus estridentes bocinas y sus estéreos para festejar.

Pero entre el bullicio se abrió paso un violinista veterano que desafió el entorno para entonar la tradicional melodía de Cielito Lindo.

“¡México, con todo, actitud, somos, podemos, México arriba, México adelante, por superación, porque somos fuerza guerrera azteca!”, pasó gritando una aficionada, bandera en mano y con pintas nacionales en las mejillas.

La forma en que México revolucionó el Mundial de Rusia al batir a la defensora del título, Alemania, en el estadio Luzhniki de Moscú, también despertó anhelos políticos en México, de cara a las elecciones presidenciales el próximo 1 de julio.

“¡Lozano presidente, Lozano presidente!”, gritaban los aficionados, haciendo referencia al autor del gol que marcó la victoria de México.

“Hemos demostrado que estamos a la altura de cualquier potencia, espero que gane quien gane como presidente, también nos sepa llevar a la victoria”, dijo Ana María Contreras, una maestra de primaria que acudió con sus hijos y perros, todos –incluso los canes– portando la camiseta del “Tri”.

Impulso social

El México que anhela Ana María, el cual compara con la victoria del combinado nacional, es el reflejo del México dolido por las injusticias y la impunidad, y también cansado por la saturación de los mensajes políticos en la antesala de los comicios más grandes de la historia.

El triunfo del “Tri” en el partido contra Alemania en Rusia 2018 paralizó al país y le dio a los mexicanos un fragmento de “paraíso” que celebrar este domingo.

Se ganó un partido que sorprendió la autoestima de toda una nación en pleno Día del Padre y a sólo dos semanas de que se celebren los comicios en donde están en juego 3 mil 400 cargos de elección popular.

Este domingo México le ganó al Campeón del Mundo y a una Alemania cuatro veces campeona. Los cronistas deportivos consideran que el equipo de Alemania de ahora, es mejor que el que le ganó al “Tri” en 2017.

Pero la Selección dio la sorpresa y para muchos aficionados el equipo mexicano ganó, porque se lo merecía.

“Ganó porque México se merecía ganar”, dijo Luis Beltrán, un aficionado que aseguró además que este domingo recibió el mejor regalo del Día del Padre.

Desahogo

Expertos consideran que el triunfo del “Tri” llega en un momento de muchas tensiones y de saturación informativa por las campañas electorales, sumado al lastre de años de violencia.

En ese marco, aunque sea en algo deportivo, a la sociedad se le otorga un pretexto para sentirse orgullosa y tranquila. Esta certeza de que le podemos ganar a Alemania da certidumbre, en un momento de incertidumbre, afirman.

Fuente Zócalo