Conecta con nosotros

Opinión

¿Dos olas más en 2022?

Publicado

el

Opinión / Cicuta del Caribe

Cancún: extranjeros, solo la mitad del turismo en la Semana Santa
• En el último año, uno de cada seis turistas fue “prestado”: Cicotur
• Obligan a turistas a firmar documento sobre drogas en los hoteles
• México, primer país que beneficia; Dominicana, el segundo: Barceló

Por: Carlos Águila Arreola

La primavera empezó “con buenas perspectivas”, y pese a la incertidumbre provocada por la invasión de Rusia a Ucrania y el alza del precio de los energéticos, el sector hotelero mira con optimismo los próximos meses pues “estamos muchísimo mejor que en 2021 y nos queda un pasito para llegar a los niveles de 2019”, de acuerdo a Jesús Almaguer Salazar, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres.

Pese a ello, hay una serie de factores exógenos que ponen en riesgo la ansiada recuperación del negocio turístico, entre otros el riesgo de una séptima ola de la covid-19 en Europa y una quinta en América Latina tras el vertiginoso aumento de los contagios en varios mercados emisores, lo que provoca cierto temor a que una nueva ola trunque el despegue del sector.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que “algunos países y territorios han reducido las medidas de salud pública antes de tiempo”, como el caso de México y particularmente Quintana Roo, en un mal entendido “semáforo verde”, que ya cumple siete semanas instituido en el Caribe mexicano, con dedicatoria totalmente para el turismo.

Según la incidencia acumulada a siete días, los niveles son alarmantes en Reino Unido, que arroja una tasa de mil 262 casos por cada 100 mil habitantes, seguido por Alemania (mil 320), Francia (mil 891) e Italia (mil 369). El aspecto positivo es que la mortalidad no tiene nada que ver con los niveles de hace un año, incluso con muchos menos contagios.

Mientras aumentan los casos en Europa y Asia oriental debido a ómicron BA.2, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), instó a permanecer vigilantes y a cerrar urgentemente las brechas de vacunación, pese a que los casos y las muertes han disminuido en la región. No obstante, se notifican más de 620 mil casos nuevos cada semana, muchos en algunas partes de América del Norte y el Caribe, donde las nuevas infecciones están empezando a aumentar.

Deltacrón
Con ómicron BA.2 ya detectado en 8.7 por ciento de las secuencias notificadas en Sudamérica, “una y otra vez hemos visto cómo la dinámica de la infección en Europa se refleja aquí unas semanas después”, señaló la OPS por medio de un comunicado. “No se puede ignorar el riesgo de nuevos repuntes. Pero ahora sabemos lo que hay que hacer para proteger a la población”, se añadió.

Con más de 685 millones de personas en la región que han completado sus calendarios de vacunación contra la enfermedad, y 50 países y territorios que ya han comenzado a suministrar dosis de refuerzo, “ahora se deben redoblar los esfuerzos para asegurar que nuestras poblaciones vulnerables reciban las dosis que necesitan”, indicó la organización sanitaria.

La OPS también instó a los países a mantener la capacidad de aplicar pruebas “para que no entremos en esa próxima oleada a ciegas” y tengamos el panorama completo de ómicron BA.2 en la región, lo que “significa que las pruebas sean fácilmente accesibles para prevenir nuevos brotes y para preparar los sistemas de salud si los casos aumentan”, se agregó.

También advirtió que algunos países y territorios han reducido las medidas de salud pública antes de tiempo, como es el caso de México y particularmente de Quintana Roo en un mal entendido “semáforo verde”, que ya cumple siete semanas instituido en el Caribe mexicano, con dedicatoria totalmente para el turismo. “Al igual que antes, se deben ajustar las estrategias cuando aumenten los casos, para salvar vidas”, subrayó la entidad sanitaria.

Tras más de un mes de descenso, los casos del virus han vuelto a incrementar en el mundo desde la semana pasada. En las últimas semanas el término deltacrón ha aparecido frecuentemente en varios sitios de noticias, Se llama así por ser una “recombinación” de las variantes delta y ómicron, pero no es una nueva variante como tal.

Más olas
La cuarta ola de la covid en México va a la baja, ya que el número de casos se ha visto reducido: “Es cierto que los indicadores están en verde, pero seguimos en pandemia, aún no llegamos a una endemia y por eso hay que seguirnos cuidando”, dijo el infectólogo Michel Fernando Martínez Reséndez, jefe de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica de la Fundación TecSalud.

El facultativo compartió su visión y planea que se vislumbran tres escenarios en el corto y mediano plazos en la pandemia; en el primero ve dos olas más en 2022, aunque es al que ve menor probabilidad, “no hay que descartar una variante que propicie un riesgo mayor a la población, aunque es poco probable (que ocurra), porque la vacunación está muy reciente”.

“Tendría que ser una variante sumamente excepcional con muchas mutaciones en la parte de (la proteína) Spike, la espícula donde se ancla el virus en el tejido respiratorio. Lo veo muy poco probable de momento. De darse ese caso, se podría esperar dos olas de la covid durante el año, al igual que en 2021, y con medidas similares a cuando comenzó la pandemia en 2020.”

De ocurrir, las medidas también tendrían que volver a ser extraordinarias: regreso al confinamiento, actividades de trabajo y escuelas tendrían que regresar a modalidad virtual; establecimientos y áreas recreativas estarían cerradas; uso de cubrebocas en todo momento, y estar muy bien informado sobre los avances en contagios y síntomas.

El segundo escenario, el más susceptible a ocurrir, prevé una ola en lo que resta del año, similar a lo que se ha registrado durante las últimas semanas con la variante ómicron, señaló Martínez Reséndez, quien destacó que se podría salir pero con responsabilidad. Se puede viajar, pero usar el cubrebocas en el avión, y si se quiere ir a comer, en terrazas”.

El tercer y último escenario es el optimista: desaparecen las olas y se pasa a fase endémica: “Siento que las personas recobrarían parte de su vida anterior”. En cuanto a frecuencia y gravedad, los casos serían controlados; no obstante, advirtió que la covid no va a desaparecer; es una enfermedad que llegó para quedarse, es algo que se nos olvida”, finalizó.

Una quinta ola de contagios en México llegaría en verano, protagonizada por una subvariante ómicron, de acuerdo al especialista, quien recordó que sería igual que al inicio de año, después del periodo vacacional, en ese caso de fin de año; ahora sería resultado de la Semana Santa, y es que se olvidó la sana distancia y, con el semáforo en verde, el cubrebocas se dejó de usar.

Menudencias
Durante Semana Santa se espera que en Cancún la llegada de turistas alcance en promedio 90 por ciento de ocupación, pero solo la mitad serán extranjeros, señaló Darío Flota Ocampo, director del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo (CPTQ), quien añadió que con base en las reservaciones y vuelos programados, se calcula que la llegada de turistas será similar al último puente festivo, pero en todos los destinos de la entidad.

El turista estadunidense que no pudo llevar a sus hijos a ver a sus abuelos a Inglaterra y que vino para acá… hay que retenerlo. En el último año, del total de visitantes a México, 34.8 por ciento son de nacionalidad estadunidense, de los que Quintana Roo ha captado la mitad, 17 por ciento o uno de cada seis, de acuerdo con el Centro de Investigación y Competitividad Turística (Cicotur), que agregó que aunque son cifras alentadoras, en realidad son “prestadas”, pues se deben en gran parte a que otros mercados estaban cerrados al turismo.

Hoteles obligan a turistas a firmar un papel sobre drogas. El documento informa que el consumo y transporte de sustancias ilícitas son delitos que se penalizan. Es una campaña liderada por el gobierno estatal, la Secretaría estatal de Turismo y los hoteleros. Va dirigida sobre todo a los springbreakers, que “debe ser firmado por el visitante como enterado (…) he leído y estoy consciente de las consecuencias legales de la compra de drogas en México”.

México, primer país que mayor contribución da a los resultados del Grupo Barceló, y República Dominicana el segundo, declaró Simón Pedro Barceló, copresidente del emporio turístico. Con 40 años en el mercado americano, aclaró que fuera del continente americano, España se sitúa en el tercer lugar. “Por todo ello, para nosotros América es clave y lo seguirá siendo, porque tenemos una gran confianza en esos dos países y otros de América Latina”.

Compartir:
Click para comentar

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

EN LA OPINIÓN DE:

El lado oscuro de la navidad: una mirada psicológica a la depresión invernal

Publicado

el

Detrás de la mercadotecnia de la época de paz en el mundo, la cifra de suicidios se eleva

Conciencia Saludablemente

Por Psicol. Alex Barrera**

Cada año, cuando el invierno comienza a instalarse y los días se acortan, noto un cambio sutil pero profundo en muchas de las personas, lo cual inevitablemente a mi parecer crea una bruma en todo el ambiente, y es que mientras la gran maquinaria de la mercadotecnia nos vende un espacio de amor, familia y entornos diseñados a modo para fomentar el espíritu de dar y recibir, la realidad es que muchas veces esto es la máscara que oculta, lo que no queremos saber, pero que nuestro cerebro ya sabe. Y no es otra cosa sino la reacción biológica natural que nos alinea con la naturaleza, invierno significa el final.

Y no, no es fatalismo, es la naturaleza terminando un ciclo, es por eso que durante el invierno muchos animales se retiran a descansar, los arboles desojados esperan pacientes para poder reverdecer, la luz del día es menos, y por supuesto los seres humanos experimentamos cambios que desafortunadamente intentamos ignorar debido a que cada día nos alejamos más y más de lo natural, pensando con la soberbia que solo el razonamiento nos puede dar, que si la luz del sol se va, nosotros podemos llenarla con pequeñas luces artificiales, que se venden en aquellos puestos que ocupan miles de esquinas en el país.

Pero dejemos el romanticismo y la filosofía de lado y para no abrumarle entremos de lleno a lo que quiero en este espacio, comentarle a usted, que se toma el tiempo de leer estas líneas y es que, si hablamos de los síntomas del invierno, incluso yo, como especialista en salud mental debo confesar que experimento cierta variación en mi nivel de energía y claridad emocional.

Así pues, le hablaré de las cosas por su nombre, lo que muchas personas experimentamos no se trata simplemente de “mal humor por el frío”, sino de un fenómeno ampliamente documentado: la depresión invernal, también conocida como Trastorno Afectivo Estacional (TAE). Aunque a veces se percibe como una exageración o un invento moderno, la ciencia ha demostrado que es una condición real y prevalente, estrechamente vinculada a los ciclos de luz y a la respuesta biológica de nuestro organismo.

La American Psychological Association (APA) explica que el TAE aparece cuando la disminución de luz solar altera nuestros ritmos circadianos, los cuales funcionan como un reloj interno que regula funciones tan esenciales como el sueño, el apetito, la energía y el estado de ánimo. Cuando ese reloj se desajusta, aumentan la melatonina —la hormona del sueño— y disminuyen los niveles de serotonina, vinculada al bienestar. El resultado es una combinación de fatiga, desmotivación, tristeza persistente, irritabilidad, dificultades de concentración y, en algunos casos, un fuerte deseo de aislamiento social.

Observando desde un ángulo clínico, lo más complejo de la depresión invernal no es sólo la sintomatología, sino la forma en que suele ser minimizada. Muchas personas que pasan por este tipo de situaciones se expresan diciendo: “Debe ser flojera”, “Solo necesito echarle ganas”, “Es normal, a todos nos cae pesado el invierno”. Y aunque es cierto que los cambios estacionales influyen en nuestro ánimo, no debemos normalizar un malestar que interfiere en la vida cotidiana. Reconocer que algo no está bien permite atenderlo y evitar que el evento evolucione hacia formas más severas por ejemplo caer en depresión.

Es importante señalar que algunas personas tienen mayor vulnerabilidad biológica a este trastorno. Investigaciones del National Institute of Mental Health (NIMH) indican que quienes viven lejos del ecuador, en regiones donde el invierno tiene menor exposición solar, presentan tasas más altas de TAE. Además, quienes tienen antecedentes de depresión mayor suelen ser más sensibles a las variaciones de luz. Esto no significa que sea inevitable, sino que debemos prestar especial atención a los primeros síntomas.

En terapia, he observado que uno de los desafíos más grandes es el impacto en la percepción personal: quienes viven depresión invernal suelen sentirse “culpables” de no rendir igual, de no tener la misma energía o motivación que en otras épocas. Explicarles el componente biológico, ese juego de hormonas, luz y ritmos internos, les ayuda a comprender que no se trata de una falla personal, sino de un proceso fisiológico que puede regularse con estrategias adecuadas. Probablemente es por ello que muchas personas no son capaces de aceptar que están pasando por un mal momento, incluso ni siquiera lo reconocer, y tapan este tipo de sentimientos con conductas dañinas que curiosamente son fomentadas con el falso espíritu de la navidad, por ejemplo las compras excesivas, o el descontrol en los hábitos alimenticios.

Aun cuando se supone que la temporada enaltece virtudes como la paz, el amor, y la fraternidad, resulta preocupante observar que la disminución de luz natural y la carga emocional invernal coinciden con un aumento sostenido de suicidios en México, en donde para 2023 se registraron 8 mil 837 suicidios, lo que representa una tasa de 6.8 por cada 100 mil habitantes, una cifra más alta que la de años previos, según el INEGI. Estos datos sugieren que la temporada de oscuridad, soledad o desánimo puede agravar la vulnerabilidad psicológica (especialmente en personas predispuestas) y transformar la tristeza estacional en crisis profundas.

Sobre esto existen métodos que pueden ayudar a reducir el riesgo de padecer TAE, ninguno de ellos tan efectivo como la atención psicológica profesional. Un especialista de la salud puede evaluar el nivel del problema además el acompañamiento terapéutico brinda herramientas para detectar pensamientos suicidas, regular el estado de ánimo y reconstruir el bienestar emocional en los meses más oscuros del año.

Algunas acciones cotidianas contribuyen significativamente a reducir el impacto del TAE. Por ello, aquí te comparto tres recomendaciones basadas en evidencia para prevenir o disminuir la depresión invernal:

1) Exponte diariamente a la luz solar entre 5 y 10 minutos, siempre con la protección adecuada.
Salir por la mañana, abrir cortinas, caminar un poco o simplemente recibir la luz directa del gran astro ayuda a regular la serotonina y el reloj biológico. Puede parecer un gesto mínimo, pero su impacto es notable cuando se vuelve parte de la rutina, eso sí, no olvides el bloqueador solar y los lentes con filtro UV.

2) Mantén horarios regulares de sueño y actividad física.
Tu cuerpo necesita estabilidad cuando la luz es escasa. Dormir a horas similares y realizar ejercicio —aunque sea ligero— mejora la energía, la regulación emocional y el descanso nocturno. Aun si la noche dura más tiempo que el día es importante mantener la rutina.

3) Cultiva espacios de conexión social, incluso si la apatía te invita al aislamiento.
El invierno tiende a encerrarnos, pero el contacto humano funciona como un amortiguador emocional. Conversar con alguien, compartir actividades o participar en grupos de apoyo contribuye a mejorar el estado de ánimo.

Y, sobre todo, recuerda que la terapia psicológica es un acompañamiento fundamental durante esta temporada. No solo ofrece un espacio seguro para explorar lo que sientes, sino que te brinda herramientas para comprender tus ciclos internos, reorganizar rutinas, manejar pensamientos negativos y fortalecer tu resiliencia. En los meses más fríos del año, cuando el mundo parece apagarse un poco, la terapia se convierte en un punto de luz que ayuda a atravesar el invierno con mayor claridad y bienestar. Y no olvides que el invierno es el final que marca el inicio de algo nuevo, la navidad no sólo es época de dar y recibir, sino que también amerita un tiempo de introspección para disminuir el ritmo y reflexionar sobre lo que finalizamos y como queremos comenzar el nuevo ciclo.

**Además de 10 años de experiencia como comunicólogo, ejerciendo el periodismo. Alex Barrera es también psicólogo por la UNAM con profundización en desarrollo Humano.
Actualmente brinda terapia clínica con enfoque Biopsicosocial.

Si deseas contactar al especialista o necesitas ayuda terapéutica puedes comunicarte vía Whats App

Para más información del tema puede consultar:

Textos de Interes

American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (5.ª ed.). Washington, D.C.: Author.
(Para la definición clínica del Trastorno Afectivo Estacional como especificador del trastorno depresivo mayor.)

Rosenthal, N. E., Sack, D. A., Gillin, J. C., Lewy, A. J., Goodwin, F. K., Davenport, Y., … & Wehr, T. A. (1984). Seasonal Affective Disorder: A description of the syndrome and preliminary findings with light therapy. Archives of General Psychiatry, 41(1), 72–80.
(Estudio pionero que define la depresión invernal y su relación con la luz.)

Melrose, S. (2015). Seasonal Affective Disorder: An Overview of Assessment and Treatment Approaches. Depression Research and Treatment, 2015, 1–6.
(Revisión general sobre causas, síntomas y tratamiento del TAE.)

Partonen, T., & Lönnqvist, J. (1998). Bright light improves vitality and alleviates distress in healthy people. Journal of Affective Disorders, 46(1), 175–181.
(Evidencia científica del impacto de la luz en el estado de ánimo.)

Rohan, K. J., Roecklein, K. A., & Haaga, D. A. F. (2009). Cognitive-behavioral therapy for seasonal affective disorder: A randomized controlled trial. American Journal of Psychiatry, 166(5), 503–510.
(Estudio que valida la efectividad de la terapia psicológica para el TAE.)

Lewy, A. J. (2007). Circadian misalignment in mood disturbances. Current Psychiatry Reports, 9(6), 517–522.
(Base científica sobre ritmos circadianos y trastornos del estado de ánimo.)

Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). (2023). Estadísticas a propósito del día mundial para la prevención del suicidio.
(Fuente de la cifra: 8,837 suicidios y tasa de 6.8 por cada 100 mil habitantes en México.)

Lam, R. W., & Levitt, A. J. (1999). Canadian Consensus Guidelines for the Treatment of Seasonal Affective Disorder. Clinical & Academic Publishing.
(Guía clínica que respalda intervenciones terapéuticas para depresión invernal.)

Compartir:
Continuar leyendo

EN LA OPINIÓN DE:

Extorsión: violencia económica que se vuelve trauma emocional 

Publicado

el

Aunque es un delito del que mucho se habla, pocos toman en cuenta la factura a la salud mental que significa no resolverlo.


Conciencia Saludablemente

Por: Psicol. Alex Barrera

La reciente aprobación en el Congreso de la Ley General para Prevenir, Investigar y Sancionar los Delitos en materia de Extorsión marca un antes y un después jurídico en México: la reforma aspira a homogeneizar criterios, perseguir el delito de oficio y endurecer sanciones frente a una práctica que se ha disparado en los últimos años. La votación responde a una urgencia tangible: la extorsión ya no es un daño sólo económico, es una máquina de erosionar vidas. 

Los números lo confirman y, a la vez, ocultan realidades. Según la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (ENVE) del INEGI, en 2023 se cometieron 747 mil delitos de extorsión contra unidades económicas, cifra que ilustra la magnitud del fenómeno entre negocios formales.  Cabe señalar que las estadísticas oficiales de carpetas de investigación son mucho menores por no decir engañosas, precisamente es por la altísima “cifra negra” (cantidad de delitos que no se registran en las estadísticas oficiales) que la mayoría de las víctimas no denuncia, es decir las víctimas tienen miedo o desconfianza institucional.  

El impacto económico también aparece con cifras contundentes. Coparmex y diversas estimaciones señalan pérdidas multimillonarias: sólo en 2025, hasta septiembre, las extorsiones han significado una erogación que supera los 21 mil millones de pesos para empresarios, además de multiplicar costos en seguridad privada y obstaculizar la inversión. 

El daño no se limita a lo material. La extorsión induce estrés crónico, ansiedad, insomnio y sensación de indefensión tanto en propietarios como en trabajadores. Pequeños comerciantes describen la extorsión como un “perdón a cambio de sobrevivir”: pagar para continuar operando. Esa lógica genera culpabilidad, vergüenza y un desgaste emocional que se transmite al núcleo familiar y comunitario. Estudios sobre victimización muestran que la repetición del ataque y la impunidad fomentan trastornos de estrés postraumático, depresión y paranoia colectiva, los cuales han sido publicados por ENVE/INEGI y reportes de victimización.  

Las consecuencias secundarias son palpables: zonas enteras ven cerrar negocios ante la imposibilidad de sostener pagos extorsivos o por la pérdida de clientes ante la percepción de riesgo. En Sinaloa, por ejemplo, Coparmex reportó el cierre de alrededor de 2 mil empresas en el primer semestre de 2025 atribuible al clima de inseguridad local; sin embargo, no existe aún una cifra nacional homologada sobre cierres empresariales exclusivamente por extorsión.  

Ese silencio la llamada la cifra negra agrava el golpe psicológico. No denunciar porque temes represalias o porque “las autoridades no harán suficiente” es una doble privación: económica y emocional. La persona queda aislada, sin redes de apoyo formales, normalizando el temor y enquistando el daño. A nivel comunitario, esa normalización mina la confianza social y la capacidad de resiliencia colectiva, además activa un mecanismo de defensa en el cerebro sobre todo porque como miembro de una comunidad el miedo se agrava pues ya no tienes libertad de acudir a lugares recreativos, esto se convierte en una viciosa cadena, que impacta también la economía, pues la extorción desmotiva la inversión, reduce fuentes de ingreso y atemoriza a la comunidad, es decir que el daño es sistémico. 

Frente a este panorama, la ley y las acciones policiales son necesarias pero insuficientes por sí solas. Es imprescindible integrar respuestas que atiendan la salud mental de las víctimas: protocolos de contención, orientación jurídica y fundamentalmente atención psicológica especializada.  

La terapia ayuda a procesar el trauma, recuperar la calma y volver a sentir que se tiene control sobre la propia vida. También permite desarrollar estrategias para manejar el miedo y evitar que este se vuelva permanente. Intervenciones breves, apoyo psicoeducativo y programas comunitarios de resiliencia pueden reducir la ansiedad, mejorar el sueño y favorecer decisiones más seguras, ya sea sobre denunciar o reestructurar la actividad económica. 

La extorsión ataca hogares y tejido económico, pero también hiere la confianza que sostiene la vida cotidiana. Por eso la política pública debe ir más allá de la cárcel para extorsionadores: debe contemplar la reparación integral del individuo y la comunidad, incluida la salud mental para que las personas y comunidades recuperen no sólo su patrimonio, sino su confianza. Si la ley ayer fortaleció la respuesta penal, hoy la prioridad es que la respuesta humana, psicológica y social. llegue al mismo ritmo. Buscar ayuda profesional no es solamente una medida individual: es un acto de reconstrucción colectiva. 

Te interesan los temas de desarrollo humano y bienestar intégrate a https://bit.ly/Kumaneko-SaludyBienestar es Gratis.

**Además de 10 años de experiencia como comunicólogo, ejerciendo el periodismo. Alex Barrera es también psicólogo por la UNAM con profundización en desarrollo humano.
Actualmente brinda terapia clínica con enfoque Biopsicosocial.

Si deseas contactar al especialista o necesitas ayuda terapéutica puedes comunicarte vía Whats App.


Compartir:
Continuar leyendo

Facebook

RECIENTE

LAS + DESTACADAS

CONTACTO: contacto.5topoder@gmail.com
Tu opinión nos interesa. Envíanos tus comentarios o sugerencias a: multimediaquintopoder@gmail.com
© 2020 Todos los registros reservados. 5to Poder Periodismo ConSentido Queda prohibida la publicación, retransmisión, edición y cualquier uso de los contenidos sin permiso previo.