Carlos Águila Arreola

CANCÚN, 29 DE OCTUBRE.- El empresario Francisco Córdova Lira adelantó que Malecón Tajamar será reabierto al público en noviembre o posiblemente el próximo fin de semana, y resaltó que “se acabaron los caprichos de los ambientalistas”; asimismo resaltó que a él no le interesa desarrollar en la zona pero sí ver que le regresen su dinero invertido.

“A mí lo que diga Katerine no me importa lo mínimo; ella no tiene autoridad moral ni autoridad legal; que haya metido un procedimiento legal, todo mundo tenemos derecho. Yo tambié tengo uno; ella me demandó en forma personal, y lo perdió en cinco minutos porque presentó una pésima demanda.

“Me relacionaba con un terreno que (ella) decía que era mío; o sea, más bien parece terrorista porque simple y sencillamente nada más bormbardea y bombardea”, refirió Córdova Lira.

Indicó que “hoy los cancunenses deben celebrar que van a poder accesar a su malecón, haya o no edificios porque se estaba destrozando paulatinamente la infraestructura”, y cuestionado sobre qué autoridad debe abrir polémico sitio, indicó que “se debe abrir con autorización del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) o del Poder Judicial”.

“¡Qué bueno que se acabó con caprichos de grupos ambientalistas!, desde mi punta de vista equivocados”, dijo en relación con la postura de Katerine Ender Córdova, quien aún se opone al acceso de vehículos al área porque “aún hay litigios vigentes”.

Precisó que una cosa es el litigio por un manifiesto de impacto ambiental que no fue cumplido con todas las de la ley, y otra clausurar para el uso vía pública; empero, manifestó su opinión de cómo están actualmente los poderes mexicanos.

“El Poder Judicial en México está hecho bolas; el Ejecutivo es corrupto, y el Legislativo retrógrada; así, esta difícil resolver el litigio de Tajamar. Es mucho más la participación ciudadana la que va a permitir dar algunos casos, el de limpiar y caminar a nadie le hace daño, pero no me va permitir construir”, señaló.

Francisco Córdova señaló que en el futuro se tendrá que sacar la “licencia social” para desarrollos que podrían tener un impacto grande.

Explicó que “se llama «licencia social» a aquella que «otorga» una comunidad a un proyecto (empresarial o sin fines de lucro) que se realiza en sus inmediaciones. Está íntimamente ligada con las creencias y percepciones locales respecto a la organización y al plan que se lleve a cabo, por lo que es intangible y puede cambiar con el tiempo.

“Actualmente, cada vez más empresas aceptan que la pueden perder si no piensan en la sustentabilidad en todas sus acciones, y el reto es definir estándares mínimos que un negocio debe tener para continuar su operación y crecimiento. Algunos estándares pueden legislarse, pero también es importante que se conviertan en norma social”, explicó el inversionista.

Dueño de un predio en el lugar, en ese sentido sostuvo que a él ya no le interesa hacer nada en Malecón Tajamar; no obstante, puntualizó que se podría hacer una consulta pública si el propio Poder Ejecutivo de la zona lo promueve; .

“La consulta pública de ayer sobre el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México todo mundo la criticó, y me parece que fue porque la hizo y la financió un partido político (se refiere al Movimiento Regeneración Nacional [Morena], propiedad de Andrés Manuel López Obrador) y a la que asistimos los que quisimos expresar nuestro punto de vista”, detalló.