Chetumal (Ericka Novelo / 5to Poder).- La Red de Víctimas Quintanarroense , Colectivo Femenil Xtabay Quintana Roo y la Red por la Equidad y los Derechos Humanos estatal, solicitaron a la dirección de Vinculación Social Asuntos Religiosos, Secretaría de Gobierno de Quintana Roo y la Dirección de Asuntos Religiosos del Municipio de Othón P. Blanco para que ejerzan sus facultades y soliciten a las Iglesias o Asociaciones Religiosas se abstengan de oponerse a la despenalización del aborto y denostar a los diputados locales.

Ariadne Song Anguas integrantes del colectivo Xtabay comentó que han solicitado este procedimiento para evitar actos de violencia en contra de los diputados de la XVII legislatura que en el mes pasado realizaron las modificaciones legislativas para despenalizar el aborto.

Lo anterior, tras convocar el 8 de noviembre pasado, una manifestación cívica y pacífica a las afueras del Congreso del Estado de Quintana Roo a fin de defender el derecho a la vida.

Fue el 26 de octubre pasado cuando se aprobó mediante un acuerdo de obvia y urgente resolución la despenalización del aborto en Quintana Roo por parte de los legisladores de la XVII Legislatura.

Indicó que algunas organizaciones religiosas y cívicas han presionado a los Diputados y Diputadas para que desistan de reconocer y proteger los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, además de querer crear una confrontación o posible conato de violencia en la sociedad.

“Consideramos y es de dominio público que sus actos han cometido infracciones a la LEY DE ASOCIACIONES RELIGIOSAS Y CULTO PÚBLICO que en su ARTICULO 12. Las asociaciones religiosas deberán notificar a la Secretaría de Gobernación su decisión al respecto”, apuntó.

Las sanciones se aplicarán en base al ARTICULO 32, a los infractores de la presente ley se les podrá imponer una o varias de las siguientes sanciones, dependiendo de la valoración que realice la autoridad de los aspectos contenidos en el artículo precedente: apercibimiento; multa de hasta veinte mil días de salario mínimo, clausura temporal o definitiva de un local destinado al culto público; entre otros.