CIUDAD DE MÉXICO, 21 DE ENERO DE 2020.- Castigo ejemplar promete la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), para la empresa Nautilus, en caso de que se confirme que hubo negligencia u omisión en la supuesta muerte de un tiburón blanco que quedó atrapado en una jaula de observación en la Reserva de la Biosfera Isla Guadalupe, en Baja California.

En entrevista con Excélsior, el titular de la Conanp, Roberto Aviña Carlín reveló que en breve la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Dirección General de Vida Silvestre (DGVS) de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) darán a conocer las sanciones contra el prestador de servicios turísticos.

“La Profepa está terminando de hacer sus procesos administrativos para aplicar las sanciones; la Dirección General de Vida Silvestre, que es quien genera los permisos específicos, también está revisando para la próxima temporada todos los permisos, no nada más ése, porque son varios más, y tenemos que tener una muy buena política para la próxima temporada, se está revisando y quién no cumpla, no podrá continuar haciendo inmersiones”, advirtió.

El biólogo destacó que desde el pasado fin de semana viajó a Ensenada para reunirse con prestadores de servicios turísticos con el fin de que contribuyan en mayor medida a la conservación de los recursos naturales y que cumplan con el plan de manejo para la observación de tiburón blanco, como son las medidas y diseño que deben tener las jaulas y los tiempos de inmersión, respetando las buenas prácticas, acorde a los principios de turismo sustentable, en beneficio de los ecosistemas, las especies y la sociedad.

“No se puede volver a repetir, no podemos ser ni flexibles, ni negligentes, ni omisos, en beneficio de lo que yo comentaba anteriormente, de la conservación, en este caso, de una población importantísima del mundo, que es el tiburón blanco, entonces no podemos permitirnos ninguna laxitud en la acción de la conservación, ni permisos, ni ingresos, etcétera”, indicó.

El 9 de octubre de 2019, un tiburón blanco colisionó con una jaula de observación de la embarcación “Undersea Hunter” de la empresa Nautilus, que aparentemente tenían una abertura de más de 35 centímetros, fuera de la norma, lo que provocó que el ejemplar de aproximadamente 3.5 metros de longitud, quedará atrapado alrededor de 25 minutos, lo que le provocó un abundante sangrado, para después soltarse y precipitarse inerte hacia el fondo del mar, de acuerdo a un video difundido por redes sociales.

Fuente: Excélsior