CIUDAD DE MÉXICO, 10 DE MAYO.- El Cruz Azul se volvió a encontrar con el equipo que los venció en las últimas dos finales de Liga entre ambos y que no cae ante ellos desde hace 15 partidos: el América. La historia fue la misma, las Águilas volvieron a ganarle a los cementeros en los cuartos de final de ida del Clausura 2019, ahora por 3-1. El desenlace de esta serie será el domingo en el mismo Estadio Azteca. 

El Cruz Azul del primer tiempo fue un equipo completamente diferente al que perdió la final del Apertura 2018. En esta ocasión, los dirigidos por Pedro Caixinha salieron menos precavidos y buscaron ofender desde la primera jugada.

Al minuto uno, la Máquina se hizo presente en el área rival. Orbelín Pineda hizo una pared con Milton Caraglio y quedó mano a mano con el portero americanista, Agustín Marchesín. Después de un fuerte choque entre ambos, el balón salió rebotado, Adrián Aldrete lo tomó e intentó quitarse al guardameta argentino, quien se lo impidió, lanzando un manotazo que lo hizo caer. 

Todo salió mal para el cuadro cementero en esa jugada. No sólo se vieron afectados porque el árbitro, Jorge Isaac Rojas no marcara el penal que cometió Marchesín, sino que también tuvieron que meter a Jonathan Rodríguez de forma obligada, debido a la lesión que sufrió Orbelín. 

Diez minutos después, el silbante sí señaló un penal a favor de los visitantes. Jorge Sánchez metió la mano en un servicio de rutina y Milton Caraglio no perdonó.

Aquel Cruz Azul de los primeros minutos, se fue desfigurando poco a poco y recordó por qué no le ha podido ganar al América desde hace 15 partidos. 

La fortuna tampoco estuvo del lado cementero. Las Águilas lograron empatar al minuto 21, gracias a un remate de Bruno Valdez en tiro de esquina, que rebotó en la cabeza de Igor Lichnovsky y logró colarse en la red. 

A dos segundos del descanso, el cuadro azulcrema logró darle la vuelta al marcador por conducto de Roger Martínez, quien sacó un colocado disparo desde fuera del área. 

El Cruz Azul que jugó el complemento tampoco fue el de la final anterior, fue mucho peor. La Máquina no volvió a generar peligro y cedió la posesión, al contrario, mismo que no la desaprovechó e hizo más grande la ventaja. 

Al 73’ Renato Ibarra sirvió para Martínez y el colombiano firmó su doblete de la noche. 

América y Cruz Azul volverán a enfrentarse el próximo domingo en el Coloso de Santa Úrsula. La Máquina requiere de su mejor versión, si no quiere volver a ser eliminado por su máximo rival.