Carlos Águila Arreola

CANCÚN, 12 DE OCTUBRE.- En la incertidumbre se encuentran trabajadores y mil 500 socios del gimnasio “Zona Fitness” de plaza Cumbres, luego de que de manera inesperada cerraran las instalaciones, lo cual de acuerdo al delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Xavier Rosado Martínez, estarían en juego hasta 180 millones de pesos de fraude.

“Entonces, hubo una conducta dolosa de los dueños, que se fueron dejando abandonado todo. Son mil 500 usuarios afectados; ahorita tenemos un diálogo con los afectados y podemos decir que los dueños alquilaban el local, los responsables de esa persona moral ya no están aquí, dejaron abandonados los equipos que por cierto están en malas condiciones.”

El entrevistado destacó lo doloso de la situación dado que el dueño cerró las instalaciones en septiembre pasado, sin previo aviso, lo que provocó preocupación en los usuarios, que abonaron con anticipación su plan anual por un valor de entre 185 y 239 dólares.

“Nosotros hemos dialogado con los miembros que desgraciadamente fueron defraudados a mediados de septiembre, cuando les ofrecieron una oferta anticipada de que si pagaban la anualidad les hacían un descuento.

“El caso es que la mayoría de socios tenía tratos colectivos con toda la familia; entonces, eran cantidades que iban desde los ocho mil (120 millones) a los 12 mil pesos (180 millones) por persona, sobre todo porque les dijeron que solamente se podían acreditar en efectivo.”

En su momento, los afectados declararon que intentaron comunicarse con la empresa central que administra, además del gimnasio de Cancún, cinco sucursales en la ciudad de México, pero no obtuvieron respuesta.

Rosado Martínez indicó que ahora estamos buscando un domicilio y dialogando con las filiales, pero aún no se sabe cuál podría tener la misma razón social: “Hay otros gimnasios, pero nosotros tenemos que citar no la forma comercial, sino a la persona moral para que haya conciliación y tener la posibilidad de una negociación”.

Los trabajadores del lugar tampoco cobraron el último salario, y la Profeco recomendó a los damnificados cancelar las tarjetas de crédito o débito que utilizaron para realizar el pago en el gimnasio “Zona Fitness”.

El delegado de la Profeco señaló que

“aunque somos una instancia únicamente conciliadora, estamos en buscar de la otra parte para poder conciliar, pero en su caso lo veo como una situación de tipo penal”.