• Atentan a balazos contra Victoria Montserrat García, en Nuevo León

CDMX.- (Calos Helios/5to Poder).- Al recibir el Premio México de Periodismo “Ricardo Flores Magón”, Cliserio Eleazar Cedillo Godínez, director general de 5to Poder Periodismo ConSentido, lamentó la escalada de ataques a los comunicadores de varios estados del país, pero sobre todo en Sinaloa, Guanajuato, Chiapas, Guerrero, Veracruz y Puebla, a los que ahora se suma un atentado más en contra de la reportera Victoria Montserrat García,quien el pasado domingo fue baleada en el municipio de Montemorelos , Nuevo León, y que milagrosamente salvó la vida.

Al término de su mensaje de agradecimiento, luego de recibir la presea otorgada por la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos A.C. (Fapermex) y el Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo (Conalipe), que presiden la sinaloense Eva Joaquina Guerrero Ríos y el reconocido periodista Teodoro Rentería Arróyave, respectivamente, dijo que coincide completamente con sus colegas periodistas de que “en nuestro país los periodistas sobreviven como corresponsales de guerra, sin haber guerra”. Diariamente se enfrentan a todo tipo de peligros, pero ahora a causa de su trabajo lo hacen en medio de balaceras arriesgando su vida.

A pocos meses de cumplir 50 años de ejercicio periodístico ininterrumpido, abundó sobre el secuestro de que fue víctima en San Felipe Orizatlán, en la Huasteca hidalguense en 1982: “Era jefe de Información de El Sol del Valle de México, de la Organización Editorial Mexicana (OEM). Trataba de profundizar en la información publicada en la Segunda Edición del periódico Ovaciones de la Ciudad de México. En el periódico se anunciaba como nota principal que ‘campesinos habían encontrado una ciudad de oro’, pero no daba detalles. Así es que con mi compañero fotógrafo Pablo Gallegos y yo llegamos hasta ese lugar, donde no había ninguna “ciudad de oro”. En cambio, la protesta armada de campesinos por el injusto reparto de tierras”, narró Cliserio.

“Pese a nuestras credenciales, los labriegos en rebelión no creyeron que investigábamos la nota para el periódico e insistían que éramos agentes y los espiábamos -continuó el galardonado-, y nos mantuvieron secuestrados durante dos noches y tres días… La realidad es que, en ese municipio y otros, cercanos a Huejutla, corazón de la Huasteca hidalguense, solo encontramos miseria, hambre y muerte de campesinos en busca de justicia por el inequitativo reparto de tierras…”

 Ahora, dijo, el trabajo de los reporteros es mucho más difícil y sumamente peligroso porque, “para cubrir una nota lo hacen entre ráfagas de balas. Urge protección y justicia para este trabajo que se realiza como si los reporteros fueran corresponsales de guerra sin haberla en México”, como dijo uno de los compañeros premiados, concluyó.